Que no te asusten ni la letra ni el sendero de palabras pues, amigo, para la sed de saber, largo trago.
Retorna tanto como quieras que aquí me tendrás manando recuerdos.


domingo, 26 de marzo de 2023

Casona de los Zorrilla. La de enfrente a la de los López de Cartes.

 
 
En esta ocasión estudiaremos un poco la casona de Zorrilla. Está situada en la plaza de Horna, a la vista de la iglesia, y ¡frente a la torre de los López de Cartes!

 
Diría que nos enfrentamos a un edificio del siglo XVII o modificado en esas fechas. La fachada principal mantiene una puerta de arco de medio punto sobre la que tenemos una ventana labrada donde se sitúa el primero de los tres escudos del inmueble. La piedra inferior representa una concha y las otras tres tienen rebajes que enmarcan doblemente la ventana. Centrado en la parte superior del hueco de luz tenemos un escudo en forma de cartela, muy desgastado. En su campo figura un árbol con dos zorros atados a su tronco, uno a cada lado. Sabemos que son zorros, y no lobos, porque estos últimos se representan con la cola levantada. En el pintón siniestro tenemos una torre. Esta representación suele ser reconocida como armas de Zorrilla. Sobre el escudo hay otro decorado de la piedra que busca protegerlo. A la izquierda de esta ventana hay abierta otra estrecha de factura contemporánea recibida en hormigón que parece la luz de un cuarto de baño y que altera el efecto buscado originalmente en la casona. En la planta baja hay otras dos ventanas modernas carentes de gracia alguna.


 

La segunda ventana labrada también se encuentra en esta fachada. Su escudo está circundado por un ramo atado con lazos y un reborde superior. En su campo vuelve a aparecer el árbol con los dos zorras empinados y atados a su tronco y en el flanco derecho del árbol un aspa. A la izquierda del árbol tenemos dos flores de lis surmontadas por la conocida torre. Volvemos a Armas de Zorrilla y alianza. La ventana tiene un conjunto armónico entre los rebajes de las piedras que lo forman y el decorado bajo ella. Sorprendentemente no se encuentra al mismo nivel que la arriba explicada.
 

Ambas ventanas destacan por la calidad de sus piedras claramente distinta a las demás. Cosa que también ocurre con la tercera ventana, poseedora de un escudo de los zorrilla. La decoración de la ventana es similar a la anterior y, como ya hemos citado, contrasta con el resto del paño de evidente inferior calidad. El escudo lo encontramos inserto en una cartela pero, en lugar de un aspa, parece tener en esa posición a un hombre señalando algo o mostrando algo. Destaquemos que el mejor acabado escudo de los Zorrilla, y  que más se conoce en Las Merindades, sea el del Palacio del marqués de Chiloeches de Espinosa de los Monteros.

 
La tercera fachada abierta, que actualmente se abre a un corral, solo tiene ventanas modernas. ¿Pudo ser que fuese una pared medianera oculta al exterior que con el tiempo devino en exterior?
 
Rastreando el apellido y el caserón tenemos a María Sainz de Incinillas Huidobro que era la hija mayor de Lope Sainz de Incinillas Huidobro -señor de la casa de Huidobro, y pariente mayor del linaje de Incinillas -y de María Sainz. Estamos a principios del siglo XVII. María Sainz de Incinillas casó con Juan Zorrilla de Rueda, señor de la casa de Zorrilla del lugar de Santa Olalla. Fueron padres de Lope Zorrilla, que casó en Panizares (Merindad de Valdivielso) con María Saravia, y del capitán de las guardias viejas de Castilla, Juan Zorrilla, que sucedió en la casa.

 
El capitán, señor de la casa y mayorazgo de Santa Olalla, se casó en La Puente con María Fernández del Valle. Les sobrevivieron dos hijas: María, que sucedió en la casa, y Ana González Zorrilla y Huidobro de quien proceden los Peredas del lugar de Quecedo de Valdivielso.
 
María Zorrilla de Rueda y Huidobro, señora de la casa y mayorazgo de Santa Olalla, casó con Juan Zorrilla de Brizuela -probablemente para mantener el apellido-, Señor del antiguo solar de Santurde, en la Merindad de Montija y de la casa y mayorazgo del lugar de Horna, junto a Villarcayo. Fueron padres de Juan (el sucesor), Francisco Zorrilla (soldado que sirvió en Cataluña y murió en Barcelona), Felipe Zorrilla y cuatro hijas: Mariana, Jusepa Orosia, Ángela y Ana. De esta última sabemos que fue mujer de Juan de Salazar, vecino de Horna.

 
Juan Zorrilla de Rueda y Huidobro, señor del solar de Santurde en Montija y de las casas y mayorazgo de Horna y Santa Olalla, alcalde mayor, juez de apelaciones, contador mayor, gobernador general de los estados del marqués de Aguilar, después de haber servido en Milán desde sus primeros años, se casó con María de Velasco. Esta era hija de Gaspar Fernández de Velasco, de la casa de Velasco situada en el valle de Mena, y de Juana González Tomillo. Esta pareja fueron padres de José y de Juan. José Zorrilla obtuvo a los catorce años la dignidad de chantre en la iglesia colegial de Aguilar de Campoo. Juan Zorrilla de Rueda Velasco y Huidobro fue el sucesor del solar de Santurde en Montija y de las casas y mayorazgos de Horna y Santa Olalla. Este caballero se casó con María Díaz de la Peña de Villa Comparada de Rueda.
 
 
 
Bibliografía:
 
“Blasones y linajes de la provincia de Burgos. V Partido judicial de Villarcayo”. Francisco Oñate Gómez.
Blog “García Huidobro de Valdivielso”.
 

domingo, 19 de marzo de 2023

¿Qué sabe ChatGPT de Las Merindades?

 
 
Lo reconozco: he caído ante las presiones publicitarias y accedí a relacionarme con esta inteligencia artificial (IA dicen ellos). Esperaba encontrarme con la sapiencia absoluta, con la llegada del futuro cual relato de ciencia ficción, con… con nada. Realicé una serie de preguntas triviales porque no tenía valor a realizar “La pregunta”. Por cierto, ese asunto es lo que relata el escritor Fredric Brown en su cuento “La respuesta”. Búsquenlo. Es impactante. Y muy explicativo de nuestra realidad.

 
Esperen que me desvío del tema. Nos han vendido ChatGPT como la interacción hombre máquina mediante un diálogo fluido, infalible, doctrinal, insuperable. Pero parece ser que le falta mucho para la divinidad. Han definido a este programa informático como un simple encadenador de palabras que construye frases sintácticamente correctas, pero correctamente erróneas también.
 
A continuación, las preguntas, sus respuestas y el análisis:
 
“¿Cuánta gente vive en Las Merindades de Burgos? Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes al padrón municipal a fecha de 1 de enero de 2021, la comarca de Las Merindades en la provincia de Burgos, España, tiene una población de 20.744 habitantes. Cabe destacar que esta cifra puede variar a lo largo del año debido a la movilidad geográfica y la estacionalidad en algunas zonas de la comarca. Además, la densidad de población en Las Merindades es relativamente baja, ya que se trata de una zona rural y montañosa”. Nada que objetar a una pregunta como esta cuya respuesta nos indica la fuente y lo pedido.

 
¿Qué poblaciones importantes hay en Las Merindades de Burgos? Algunas de las poblaciones más importantes de Las Merindades son:
 
  • Medina de Pomar: es la capital de la comarca y cuenta con una población de alrededor de 5.000 habitantes. Es un importante centro comercial y turístico, y cuenta con numerosos monumentos y edificios históricos.
  • Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja: es una villa de unos 3.500 habitantes, situada en el centro de la comarca. Es la segunda población más grande de Las Merindades y cuenta con un rico patrimonio histórico y cultural.
  • Espinosa de los Monteros: es una villa situada al norte de la comarca, con una población de alrededor de 2.000 habitantes. Es conocida por su impresionante entorno natural y por ser un importante centro de actividades al aire libre. (No sabe que es la población con más edificios históricos después de la capital de la provincia).
  • Valle de Mena: es un municipio situado al sur de Las Merindades, con una población de alrededor de 5.000 habitantes. Es conocido por su importante patrimonio cultural y natural, así como por ser un importante centro de actividades económicas. (¡Madre de Dios! Empezamos con los problemas: El Valle de Mena está al NORTE de Las Merindades y, hombre, es una cabecera de comarca no Wall Street).
 
Estas son solo algunas de las poblaciones más importantes de Las Merindades, ya que la comarca cuenta con numerosas localidades y núcleos de población de menor tamaño, pero igualmente interesantes desde el punto de vista turístico y cultural”. Estas frases de cierre se repiten en todas las respuestas.
 
En el ranking de preferencias turísticas de España, ¿en qué posición se encuentran Las Merindades de Burgos? No tengo acceso a un ranking actualizado de preferencias turísticas de España que incluya Las Merindades de Burgos específicamente. Sin embargo, de acuerdo a información proporcionada por la Diputación de Burgos, la comarca de Las Merindades está experimentando un creciente interés turístico en los últimos años, debido a su riqueza patrimonial, cultural y natural.
 
La comarca de Las Merindades cuenta con importantes recursos turísticos, como son la naturaleza, el patrimonio histórico y artístico, la gastronomía y las actividades de ocio y aventura. Además, hay diversas iniciativas promovidas por la Diputación de Burgos y los ayuntamientos de la comarca para promocionar el turismo en la zona, como son la creación de rutas turísticas, la mejora de la señalización turística y la organización de eventos culturales y deportivos.
 
En resumen, aunque no dispongo de un ranking específico de preferencias turísticas, Las Merindades de Burgos está ganando popularidad como destino turístico debido a sus atractivos naturales y culturales, y a las iniciativas de promoción turística que se están llevando a cabo”. Como ocurría en aquel anuncio televisivo de un juego de mesa: “Aceptamos pulpo como animal de compañía”.

 
¿Cuáles son los lugares turísticos más vistos en Las Merindades? Las Merindades de Burgos es una comarca que cuenta con numerosos lugares turísticos de interés, tanto de carácter natural como cultural. A continuación, mencionaré algunos de los lugares más visitados por los turistas en la zona:
 
  • Parque Natural de los Montes Obarenes-San Zadornil: es un espacio natural protegido que se extiende por la parte sur de Las Merindades y que cuenta con una gran riqueza paisajística y biológica.
  • Cascada de Pedrosa de Tobalina: es una impresionante cascada situada en el municipio de Pedrosa de Tobalina, que forma parte de un entorno natural de gran belleza.
  • Monasterio de San Juan de Ortega: es un importante monumento románico ubicado en el municipio de Barrios de Colina, que cuenta con una impresionante portada y un claustro de gran belleza. (Ni se acerca. Este monasterio está en la sierra de la Demanda, al sur de la provincia de Burgos, bastante lejos de Las Merindades. Fallo.)
  • Cuevas de Ojo Guareña: es un complejo kárstico situado en el municipio de Merindad de Sotoscueva, que cuenta con más de 100 kilómetros de galerías subterráneas y una gran riqueza geológica y biológica.
  • Mirador de Monte Santiago: es un mirador situado en el municipio de Medina de Pomar, desde el que se puede disfrutar de una impresionante vista panorámica de la comarca de Las Merindades. (Ups, yo diría que pertenece a Berberana y no a Medina de Pomar).
  • Centro de Interpretación del Románico: ubicado en la localidad de Oña, este centro ofrece información detallada sobre el arte románico de la comarca y cuenta con una amplia colección de piezas artísticas. (El del románico está en Medina de Pomar y el del medievo en Oña por lo que le apuntaremos otro fallo).
  • Ruta de los Dólmenes: se trata de una ruta turística que recorre algunos de los dólmenes más importantes de la comarca, como el Dolmen de la Huesera, el Dolmen de Alto de la Tejada o el Dolmen de la Cotorrita”. El dolmen de la Huesera está en Álava; el dolmen de Alto de la Tejada está en Soria; el tercero sí está en Las Merindades.


Llegado a este punto me pasé a preguntar sobre historia, motivación principal de esta bitácora y les pregunté “¿Cuántas y cuáles han sido las batallas acontecidas en Las Merindades de Burgos? Las Merindades de Burgos, como muchas otras regiones de España, han sido escenario de numerosas batallas a lo largo de la historia. (Parole, parole, parole) A continuación, se mencionan algunas de las batallas más importantes que tuvieron lugar en esta comarca:
 
  • Batalla de Padilla (1521): Esta batalla tuvo lugar cerca del pueblo de Villasur de Herreros, en la comarca de La Bureba, que forma parte de Las Merindades. Fue un enfrentamiento entre las tropas comuneras y las fuerzas del rey Carlos I, que resultaron victoriosas. Los líderes comuneros Juan de Padilla, Juan Bravo y Francisco Maldonado murieron en la batalla. (¿Por dónde empiezo? Se refiere a la batalla de Villalar que no fue en Las Merindades ni en Villasur de Herreros; el pueblo que cita no está en La Bureba sino en el Alfoz de Burgos; y La Bureba no pertenece a Las Merindades).
  • Batalla de Atapuerca (1054): Esta batalla tuvo lugar en la llanura de Atapuerca, cerca del pueblo de Ibeas de Juarros, en la comarca de La Sierra de la Demanda, que también (no) forma parte de Las Merindades. Fue una lucha entre las fuerzas del rey navarro Sancho Garcés IV (no, García Sánchez III) y las del rey castellano Fernando I, en la que resultaron victoriosos los castellanos.
  • Batalla de Las Navas de Tolosa (1212)”. (Ni me apetece comentar las inexactitudes de este punto. No sé ni porqué la incluye).

 
Dado lo que respondió sobre los combates en nuestra comarca le pregunté: “¿Conoce el libro "Batallas en Las Merindades"? No puedo asegurar que conozca todos los libros que se han publicado sobre Las Merindades de Burgos, ya que existen muchas publicaciones sobre esta comarca. Sin embargo, tras realizar una búsqueda, he encontrado información sobre un libro titulado "Batallas en Las Merindades", escrito por el historiador Julio César Santoyo Velasco y publicado en 2008. (¡La leche que me dieron a mamar! El libro es de 2014 y tiene dos autores llamados Aitor Lizarazu y Felipe González. El Julio César Santoyo Velasco que he encontrado no era historiador sino general de la Policía Nacional de Colombia).
 
Según la información que he encontrado, este libro recoge la historia de las batallas que se libraron en la comarca de Las Merindades de Burgos a lo largo de la historia, desde la Edad Media hasta la Guerra Civil Española. En él se describen las tácticas militares, los personajes relevantes y los escenarios de estas batallas, así como su impacto en la historia de la zona. (¡¡¡Correcto!!!)
 
Es importante tener en cuenta que no he tenido acceso al libro en sí mismo, por lo que no puedo dar una opinión detallada sobre su contenido”. Gracias a Dios.

 
Y, vista la respuesta a la pregunta anterior, pregunté sobre libros escritos con el tema de Las Merindades. Me dijo que “se han escrito varios libros sobre Las Merindades, tanto en formato de novela como en formato de ensayo o guía turística. A continuación, se mencionan algunos de ellos:
 
  • "Las Merindades" de Alberto León: Es una guía turística de la comarca de Las Merindades que incluye información sobre su historia, patrimonio, gastronomía, fiestas y tradiciones. (No me consta ni su existencia).
  • "Las Merindades en la historia" de Fermín Herrero: Es un ensayo que repasa la historia de Las Merindades desde la prehistoria hasta la actualidad, haciendo especial hincapié en la Edad Media y la época de la repoblación. (Fermín Herrero Redondo es un poeta y profesor de secundaria que sí he localizado, pero no ha escrito nada sobre nuestra tierra).
  • "El fantasma de la leyenda" de Jesús Ángel Bravo: Es una novela que transcurre en la comarca de Las Merindades y que mezcla elementos históricos y fantásticos para contar la historia de un misterioso fantasma que aparece en la zona. (Disparan al mar y no aciertan).
  • "Las Merindades en la memoria" de César Pérez Gellida: Es una novela que sigue la investigación de un detective que debe resolver un caso de asesinato en la comarca de Las Merindades, lo que le lleva a descubrir secretos oscuros del pasado de la zona. (César es un autor de novelas, pero no tiene nada que ver con esta zona. Además, ese título es el nombre de un blog sobre la guerra civil de 1936-1939).
  • "Bajo las estrellas de la montaña" de Juanjo Martínez: Es una novela juvenil que narra las aventuras de un grupo de jóvenes que pasan el verano en un campamento en la montaña de Las Merindades y que descubren secretos ocultos en la zona. (Si existiese -si existiese- hasta me gustaría leerla).
 

Estos son solo algunos de los libros que se han escrito sobre Las Merindades, pero existen muchas otras obras que también tratan sobre esta com… network error. There was an error generating a response”. La respuesta terminó con este comentario en inglés. No sé si es un consuelo ver que la máquina andaba loca. Insistí en la pregunta y respondió: “Existen varios libros y publicaciones que tratan sobre la comarca de Las Merindades de Burgos, tanto de carácter histórico como turístico y cultural. A continuación, se mencionan algunos de ellos:
 
  • "Las Merindades de Burgos" de Ángel Alcalde: Este libro, publicado en 1994, es una obra de referencia sobre la comarca. En él, el autor recoge la historia, el patrimonio y la cultura de las diferentes zonas que conforman Las Merindades. (Si esperaban que ahora acertase el programita tonto, pues, lo tienen claro).
  • "Las Merindades de Burgos: un paisaje para la historia" de Francisco J. Sanz San Miguel: Esta obra, publicada en 2015, es una guía turística que recoge los principales atractivos de la comarca, tanto naturales como culturales. Además, incluye información sobre rutas de senderismo y otras actividades al aire libre. (No existe).
  • "El Valle de las Caderechas. Historia, Arte y Naturaleza" de Tomás Arranz: Este libro, publicado en 2013, se centra en el Valle de las Caderechas, una de las zonas más hermosas y desconocidas de Las Merindades. En él se recoge la historia, el patrimonio y la cultura de esta comarca, así como información sobre su flora y fauna. (Olvídense).
  • "El Cid en las Merindades de Burgos" de Alfonso García-Osuna: Este libro, publicado en 2010, se centra en la figura del Cid Campeador y su relación con la comarca de Las Merindades. En él se recogen los lugares y acontecimientos relacionados con el Cid en la zona, así como información sobre su contexto histórico y cultural. (Google no ha encontrado ni una posible referencia, cero).
  • "La ruta jacobea por Las Merindades" de Manuel Arístegui: Este libro, publicado en 2014, es una guía para recorrer el Camino de Santiago por la comarca de Las Merindades. En él se incluyen mapas, descripciones detalladas de las rutas y recomendaciones para los peregrinos”. Evidentemente: no existe. Y, si se han percatado, no ha repetido la lista -inventada- de libros.

No me desanimé y seguí preguntando con sorpresa creciente. Esta vez le solicité personas famosas de Las Merindades. Tras la introducción boba me dijo que eran de esta comarca Gonzalo de Berceo, Pedro de Villandrando, Juan de Zumárraga nacido en Durango, Pedro Menéndez de Avilés y Diego de Porres. Decepcionante.
 
En este punto ya estoy sumamente preocupado por cómo la propaganda televisiva nos había vendido este fabuloso programa, esta Inteligencia Artificial y por saber a qué fuente recurre. ¿O qué fuentes se inventa?: ¿Qué fuentes consulta sobre Las Merindades? Como una inteligencia artificial, consulto múltiples fuentes en línea sobre Las Merindades, incluyendo artículos de prensa, guías turísticas, sitios web oficiales, bases de datos y enciclopedias en línea, entre otros recursos en línea. También puedo consultar información de libros y publicaciones especializadas sobre la región. Trato de recopilar información actualizada y verificada de fuentes confiables y respetadas para proporcionar respuestas precisas y completas”. Ja, ja, ja.

 
Estaba claro, ya, que esta bitácora no era fuente para ChatGPT, pero se lo pregunté: “¿Conoce el Blog "Siete Merindades”? Como una inteligencia artificial, no tengo acceso directo a información sobre blogs o sitios web específicos, a menos que estén indexados en la web. Sin embargo, puedo decir que "Siete Merindades" es un nombre que hace referencia a la comarca de Las Merindades, situada en la provincia de Burgos, en la comunidad autónoma de Castilla y León en España. Es posible que se trate de un blog o sitio web que promueva la difusión y el conocimiento de la comarca y sus atractivos turísticos y culturales”. Vamos, que no rastrea la internet.

Foto cortesía de José Antonio San Millán Cobo.
 
Aunque ya tenemos todos claro de qué ha ido el tema, incluiré esta pregunta porque resume bien lo que me resultó ChatGPT: una filfa. ¿Qué sabe de la Pirámide de los italianos? La Pirámide de los Italianos es un monumento situado en el municipio de Medina de Pomar, en la comarca de Las Merindades de Burgos. Se trata de una pirámide escalonada de 18 metros de altura, construida en 1919 por un grupo de inmigrantes italianos que trabajaban en la fábrica de curtidos de la zona. La construcción de la pirámide fue una iniciativa de los propios trabajadores italianos, que quisieron crear un monumento que simbolizara su presencia en la comarca y su agradecimiento por la acogida que recibieron. Para la construcción de la pirámide utilizaron materiales de la fábrica, como cemento y piel curtida, y contaron con la ayuda de algunos trabajadores españoles. La Pirámide de los Italianos se ha convertido en un símbolo de la presencia de la comunidad italiana en la comarca de Las Merindades, y es considerada uno de los monumentos más emblemáticos de la zona. Actualmente, se encuentra en buen estado de conservación y se puede visitar libremente”. Con un par. Pongo el pantallazo por si no me creen.

 
Quizá es porque no tiene muchas fuentes en castellano, porque sea un reclamo para capturar teléfonos y direcciones de correo electrónico, porque estemos entrenándola, pero, hoy por hoy, los profesores de Las Merindades pueden estar tranquilos: los chavales no podrán preguntar a esta IA sobre la historia y los lugares de su comarca.
 
Y sigan viniendo a esta bitácora a obtener informaciones fiables. Gracias.
 
 

domingo, 12 de marzo de 2023

El “Alcázar” de Salazar.

 
 
El pueblo de Salazar está declarado como "bien de interés cultural con categoría de conjunto histórico". Puede no parecernos mucho, pero, después de Espinosa de los Monteros, esta es la población burgalesa con más caserones. La primera mención a Salazar procede del año 999 al incluirlo en el documento de cesión a Cervatos de derechos de pastos en el cordal cantábrico. Figura como “portillo de Salazar”. Reaparece en 1011, entre los lugares que se ponen en manos de Tigridia. En 1350 Salazar era un compendio de jurisdicciones feudales: era behetría, pero también había dos solares de encartación, un solariego de Pedro Fernández de Velasco, solares yermos, y otros de la orden de San Juan de Jerusalén.

 
Salazar estuvo compuesto por tres barrios, con los nombres de Santa María, cuyo centro de culto era la iglesia altomedieval de Santa María; Cadebila, cuyo nombre proviene del cabo de villa (Cap de villa) que se localiza al otro extremo de Santa María; y el barrio del Placer, lo que lleva a pensar en la existencia de algún lupanar.
 
Sobre los salazares debemos saber que aquí hubo un par de torres de este clan de origen navarro que, con el paso del tiempo, adquirirá peso económico y político en Las Merindades y, luego, en la Corte. En el reinado del rey Sancho IV de Castilla (1284-1295) se produjeron las sangrientas luchas banderizas entre los Velasco y los Salazar por la hegemonía política en Las Merindades. Los velasco fueron derrotados junto a la torre de Caniego en Mena y fue presa Sancha Carrillo, viuda de Sancho Sánchez de Velasco. Luego los salazar la liberaron. Malo. Pero muy malo. Ella no perdonó su derrota y sus huestes atacaron el pueblo de Salazar. Fue hacía 1320: “Continuándose la guerra entre estos de Velasco, e de Angulo, e de Salazar esta doña Sancha Carrillo de Velasco derribó la casa e palazios de Salazar, que eran de Lope García, e tomo las maderas e teja, e escrituras, e sacolo a un campo para faser con ello unos palacios e casa, e como lo sopo Lope García, tomó consigo L (50) de cavallo. e CC (200) omes de pie, e salió una noche de Nograron con luna, e amanecióle en Salazar, e como lo vieron todos los vecinos, e carpenteros, echaron a fuyr asía el monte, que es a cerca, e como los el vio yr asi fuyendo, llamolos desiéndoles, tomad acá, mis naturales e parientes, que vos no avedes culpa, e tornados, díoles de comer allí con los suyos, e dio fuego a las maderas e teja por quatro logares, e así quemado, díxoles agora, parientes e naturales, quedad vos a Dios, que nunca más aquí me veredes, pero doña Sancha ni los de Velasco nunca faran casa ni palacio con los que mis antecesores dexaron”.

 
En la guerra entre los hermanastros Pedro I y el pretendiente bastardo Enrique II los Salazar apoyaban al rey legítimo. La victoria de Enrique haría que los Velasco recibieran el premio por su apoyo al nuevo rey. Dice García de Salazar, señor de Muñatones, en sus “Bienandanzas y fortunas” que “muerto luego el Rey don Pedro, e quedando Diego López de Salsedo, su fijo, moço de tres años, quedando Pedro otro cavallero destos godos pobló en Salazar, que es en Castilla Vieja so la Sonsierra, cavó los montes que poblaron él e sus descendientes, una yglesia e una torre con sus moradas e çercas (...)”.
 
Leído lo anterior nos trasladamos a la tercera década del siglo XVII cuando, al parecer, Simón Gómez Salazar, que se declaraba "criado de Su Magestad, residente en la Corte, familiar del Santo Oficio y alguacil de los demás familiares della", buscaba recuperar presencia de su familia en esta población. Así, mediante Diego Gómez, concertó con Pedro de Sarabia el uno de septiembre de 1624 para que, conforme a la traza y condiciones firmadas en Madrid, llevase a cabo el derribo de la antigua torre, volviéndola a erigir con mayor elevación, uniéndola a un edificio de dos alturas. Pedro de Sarabia era un maestro de obra montañés. Uno de muchos que se movían por Castilla haciendo trabajos dada la buena fama que habían conseguido y gracias a una eficiente red de contactos. El trabajo se estipuló en 650 ducados, precio por el que Sarabia también debía levantar, junto al presbiterio de la iglesia parroquial de Santa María de Salazar, una capilla donde Simón Gómez Salazar quería colocar la imagen del Santo Cristo que había traído de Madrid para "aprovechamiento del pueblo". Al final se fundaría la capilla funeraria familiar, lo que reafirmaba el deseo de una permanente vinculación con la localidad.
 
Aunque a primera vista recuerdan al alcázar de Medina, este trabajo de Sarabia parece estar más relacionado con algunas grandes casonas de la actual Cantabria. Es un esquema representativo de palacete central flanqueado por dos torres de sillería. En este caso, edificaciones achaparradas y desalineadas. De ambas, la del norte es más antigua. Nuestras dos torres son principalmente de sillería, pero el cuerpo central y el resto de los edificios son de mampostería. El conjunto no solo son las torres y el cuerpo central, sino que se integran con una huerta, un jardín trasero cercado cuya puerta se abre a la carretera y las otras dependencias secundarias de servicio.

 
El caserón dispone de pocos vanos al exterior en la parte baja, aunque tiene numerosas saeteras y troneras distribuidas aleatoriamente. Otros detalles, en cierto modo, que contradicen la documentación sobre este lugar, y parecen demostrar que, al menos algo de las torres, pertenecen a los años de tránsito del siglo XVI al XVII son: los arcos de medio punto, las proporciones cúbicas, las molduras, el perfecto tallado de los sillares, cierta sensación de pesadez debida a la escasa altura y al estar levantadas en llano... Posiblemente fueron levantadas por el abuelo de Simón Gómez Salazar, Rodrigo de Salazar. Sobre este tema volveremos más adelante.
 
El vano de entrada está recercado con sencillo marco de escaso resalte. Por tradición e influencia de los palacios italianos las torres levantadas a partir del Renacimiento mantienen pocas ventanas en su tercio inferior, pero son grandes -en nuestro caso vemos dos balcones- y numerosas en las plantas superiores, cuando si se hubiera tenado en cuenta la iluminación y el efecto del aire habría resultado todo lo contrario. Los balcones se resguardan con un delicado cuerpo de rejería, que apoyan en balaustres a modo de roleos de estética posterior a la construcción. El escudo de los Salazar está centrado con el eje con la entrada. Está timbrado por un casco de hidalgo y lleva por adorno penachos, lambrequines y, a ambos lados, dos cabezas de infantes. En su campo tenemos observamos las conocidas armas de Salazar: sobre campo de gules, trece estrellas de oro. Los escudos presentes en la otra torre tienen una labra de inferior calidad y, aparte del central, ignoro fehacientemente su filiación.
 
Pero, sin duda, lo que otorga a esta residencia un gran valor estético es el engarce entre los escudos, cuerpos de rejería y puertas y ventanas con herraje. El hierro y la madera se contraponen a la piedra. Además, destacamos un repertorio decorativo basado en una naturaleza amable: el follaje que rodea los escudos o las mazorcas con las que se articulan los balaustres de la rejería. En los interiores sólo las escaleras parecen concentrar el interés estético al disponerse con trabajados antepechos articulados mediante pilastras rematadas por bolas.

 
La torre está diseñada para destacar la posición de los Salazar en la Corte de Felipe IV, frente a la anterior preeminencia de los Velasco, y su papel de benefactores de la localidad. Ha sobrevivido una información de 1672 que decía que “se les guarda así al pretendiente (Andrés Salazar) como a sus padres y abuelo materno todas las exempciones de nobles por serlo notoriamente y por ser público que el pretendiente es dueño de la casa, torre y solar de la Casa de Salazar sita en el lugar de Salazar. Casa de las más ilustres de la Montaña... distante del dicho lugar de Salazar trezíentos passos poco más o menos al lado de medio día de dicho lugar y su puerta principal mira al Norte y tiene torre antigua labrada desde los çimientos de piedra de sillería y está eminente al edificio de la Casa más de dos estados y toda ella en quadro y en el liento de dicha torre que mira al poniente tres estados en alto ay tres escudos de armas labrados en mármol uno en medio y mayor y dos a los lados el de la mano derecha tiene por divisa un castillo (¿El antiguo escudo de los Salazar?) y el de la mano izquierda çinco estrellas y el principal del medio treze estrellas, y a los lados de la torre corre una pared de piedra de sillería con almenas por el lado izquierdo que parece mucho más antiguo que el de la mano derecha que pareçe está edificado de nuevo y los demás quadros de la casa no están murados porque todos miran a lo interior della y a una guerta y jardín”. Lo que no incluye es que en la torre derecha según el camino hay otro escudo situado en una ventana que da al jardín y que incluye uno de los escudos visto en el paño principal. Es sencillo y sin timbrar. Su campo es medio partido y cortado. Entre las dos primeras particiones tenemos cinco estrellas de ocho puntas en sotuer y, en la tercera, catorce figuras ovaladas que bien podrían ser cabezas humanas. Las piedras que encuadran la ventana doble y el escudo tienen una moldura que las enmarca y resalta. Al pie de esa ventana hay un puerta con arco de medio punto que aparenta mayor antigüedad que la  exterior.

 
En el paramento sur aparece un ventanal adornado de diversas molduras, entre ellas una que abarca ambos vanos y bajo el mismo los escudos no identificados -el del castillo y el otro-. En todo el perímetro del último piso de ambas torres se abren abundantes vanos. La cubierta es a cuatro aguas, cuyos aleros se apoyan en pequeña cornisa moldurada.
 
Ya hemos hablado del parentesco de esta familia en esta bitácora (Los primeros Salazar: de Las Merindades a Vizcaya) pero las versiones sobre el origen de este clan van desde los hermanos Gastón y Galindo de Salazar, naturales del reino de Navarra, a un caballero godo que pobló Salazar y tuvo dos hijos, uno que quedó allí y el otro que pasó a Tobar. Según la primera versión, los citados hermanos poblaron Salazar por los años 880 en tiempos del conde Diego Porcelos. Gastón dejó Salazar a su hermano y pasó a poblar Tobar. Para estas versiones -más o menos ciertas- el hijo y sucesor de Galindo de Salazar fue Martín Galíndez que fundó siete torres y casas fuertes para defenderse de los moros, siendo la principal la que se llamó Quintana Martín Galíndez. Le sucedió su hijo Gonzalo Martínez de Salazar, tercer señor de la casa de Salazar, que vivió en tiempo del conde Fernán González, y guerreó contra los moros por el año 908. Tuvo dos hijos: el mayor y sucesor fue Martín González y el segundo Ruy Martínez de Salazar que casó y pobló en Villerías, junto a Medina de Pomar, y tuvo entre otros hijos a Fernán Ruiz de Villerías el cual tuvo sólo una hija que casó con García Sánchez de Arce de quien procede el linaje de Arce.
 
Martín González de Salazar, cuarto Señor de Salazar, luchó junto a Ramiro II (931-951). Fue padre de Gonzalo de Salazar, sucesor, y de García de Salazar, hijo segundo, cuyo hijo heredó la casa de Salazar. Gonzalo García de Salazar, sexto Señor de la casa de Salazar, tuvo sólo a García González de Salazar que, séptimo Señor, tuvo por sucesor a García de Salazar. Este vivió en los tiempos de los reyes Sancho II y Alfonso VI. Tuvo dos hijos: Gonzalo García de Salazar, que le sucedió, y Gutierre de Salazar que sirvió al rey Alfonso VI en la toma de Toledo y en otras guerras donde acudieron algunos ingleses con los que tuvo amistad. Con ellos pasó a Inglaterra donde se casó.

 
Gonzalo García de Salazar, noveno Señor de Salazar, fue padre de Lope González de Salazar, que le sucedió; Urraca de Salazar que casó con García Sánchez de Torres de quien vienen los Torres de Soria; y de Inés de Salazar que casó con Diego Ordóñez de Rosales descendiente de Diego Ordóñez, que retó a los de Zamora por la muerte del rey Sancho.
 
Lope González de Salazar, décimo Señor de las casas de Salazar tuvo sólo a García López de Salazar, undécimo Señor de las casas, que casó con Inés de Rosales, su prima carnal. Le sucedió su hijo Lope García de Salazar, duodécimo Señor de las casas, que fue un caballero adinerado y desposó a María Díaz de Mendoza, hija de Álvaro Díaz de Mendoza, el de Alba, que se decía descendiente del mítico Jaun Zuría, primer Señor de Vizcaya. Fueron padres de García López de Salazar, su sucesor; de Gonzalo García de Salazar; y de Lope García de Salazar que inició la carrera de clérigo.
 
Es en este punto cuando las tensiones de bragueta fructificaron en un relato donde, en una cacería, a los tres hermanos se les perdió un halcón. Buscándolo llegaron a la casa de Martín Ruiz de la Cerca que les convidó a cenar. Lope García de Salazar -el que iba para cura- aprovechó para acostarse con Mayor (María) que era hija de Martín. ¡Pleno! Ella se quedó embarazada de gemelos: Lope García de Salazar, que sucedió a su tío García López y Ruy Martínez de Salazar. Se produce esta sucesión tan peculiar porque, como ya contamos en una entrada de 2014, este “ejercicio de caderas” le costó la vida al pasional, y homónimo, Lope García de Salazar.

 
Lope García de Salazar, decimocuarto Señor de las casas de Salazar, heredó de su abuelo Martín Ruiz de la Cerca y fue un Rico-hombre del Reino de Castilla y privado del rey Alfonso X (1252-1284). En 2014 lo situamos en la corte de Fernando III, el padre de Alfonso. Este Salazar es el que derrota al moro y gana las trece estrellas de su escudo. Se casó con Elvira (o Ana) Ortiz Calderón, hija heredera de la casa fuerte de Nograro. Otro Lope García de Salazar le sucedió en las casas de Salazar y Nograro. Para los que estén cotejando esta lista con la del año 2014, este sería el conocido como “El Prestamero”, decimoquinto señor que mantuvo muchas guerras con los Angulos y los Velasco. Apoyó al rey Pedro I, “El Cruel” (1350-1369), contra su hermano Enrique de Trastámara y pagó el error con la pérdida de varias Casas Fuertes.
 
Sabemos que tuvo 120 ilegítimos -bastardo más, bastardo menos-. El mayor fue Juan López de Salazar que heredó el solar de San Cristóbal y pasó a poblar Somorrostro. De él descendieron los Salazar de Somorrostro y Muñatones. Evidentemente, esta abundancia de hijos permitió que esta casa se distribuyese a lo largo y ancho de Castilla: el segundo, Juan López de San Pelayo pobló ese lugar de Montija (Las Merindades); García López de Salazar del que descienden los Salazares de Toledo y Ocaña; Martín García de Salazar del que descienden los Salazares de la ciudad de Burgos; Gutierre de Salazar pasó a Navarra y se instaló en Marcilla donde fue tan fértil como su padre…
 
El “Prestamero” estuvo casado con Berenguela Hurtado de Salcedo, hija de Pedro González de Agüero y de María Hurtado de Salcedo, hermana del Señor de Ayala. Fueron padres de Juan Sánchez de Salcedo, heredero de las casas de Nograro; de Lope García de Agüero; de Gonzalo García de Salazar, que heredó -y usurpó a su hermano mayor- la casa y hacienda del lugar de Salazar, de La Cerca y de Quintana Martín Galíndez; y de Fernán Hurtado de Salazar. Aquí divergimos de los estudios de Gregorio Bañales quien decía que sólo tuvo dos hijos y una hija legítimos. No sabemos por él nada de Gonzalo y de Fernán. En este punto pueden ustedes dejar de cotejar los datos ofrecidos en 2014 puesto que los últimos nombres recogen salazares vizcaínos, que era la idea central de aquella entrada.

 
Gonzalo García de Salazar, ese “nuevo” hijo de “El Prestamero” fue sucedido por su hijo y tocayo Gonzalo García de Salazar, que fue caballero de la Banda y, también, fue desterrado al perder Pedro I. Estuvo casado con María Alfonso Delgadillo que era hija de Alvar Fernández Delgadillo, señor del solar de Delgadillo y de Tamayo. Fundó el mayorazgo de las torres de Tamayo y edificó su iglesia el año 1402. Fueron sus hijos Álvaro González de Salazar, Juan García de Salazar, Sancho Lope García, Pedro de Salazar… y tres bastardos que solo eran de Gonzalo.
 
Alvar González de Salazar, el heredero, se casó dos veces: con Sancha de Angulo hija de Gonzalo Varona, señor de Cuezva. Fueron padres de Gonzalo García. Después con Clara Gutiérrez de Escalante y tuvieron a Juan de Salazar, que marchó a Zamora, y a María González de Salazar que se casó con García Guerra, señor de la casa de Ibio en Cabezón (Cantabria).
 
Gonzalo García de Salazar, el heredero de Alvar, matrimonió con una hija del abad de Riva-Martín y sus hijos fueron Sancho, Gonzalo (heredero de la hacienda y casas de Quintana Martín Galíndez) y Álvaro de Salazar. Sancho de Salazar, señor de Salazar, desposó a Leonor de Isla, hija de Pedro Fernández de Isla, y tuvo, entre otros, a Juan Sánchez de Salazar -sucesor- y a Sancho González de Salazar. A Juan Sánchez, a su vez, le sucedió Pedro Díaz de Salazar.
 
Pedro Díaz de Salazar fue padre de Juan, que le sucedió, y de Pedro. Juan de Salazar se casó con Ana de Medinilla y fueron padres de Agustín, que le sucedió en la casa, y de Mateo, caballero de la Orden de Santiago. Agustín desposó a Juliana de Salazar, hija única del coronel Ochoa de Salazar, caballero de la Orden de Santiago y señor de la casa de Salazar de Portugalete. Este matrimonio reunió la rama portugaluja y la de Las Merindades de esta casa. De ellos nacieron Rodrigo de Salazar, que sucedió a sus padres; Juana de Salazar que casó con García de Rueda; y Elvira de Salazar, monja.

 
Rodrigo de Salazar, señor de las casas de Salazar y de Portugalete, aparece en los libros parroquiales de Salazar casado con Juana, que en alguna de las partidas de bautismo de sus hijos figura con el apellido Manrique y en otras con el de Múgica. O eso o fueron dos esposas. Hijos de este matrimonio fueron Juan, nacido el 21 de diciembre de 1598, Andrés, Rodrigo, Gaspar, Alonso y Agustín. Murió Rodrigo el 21 de agosto de 1632 sin testar. Juana de Mágica murió el 31 de diciembre de 1646.
 
El genealogista Luis Varona Saravia exponía que, a principios del siglo XVII, las torres de Salazar estaban arruinadas. Aquí hay cierta divergencia entre las fuentes porque algunos creen que estas torres fueron reconstruidas por este Rodrigo de Salazar gastando en ello todos los bienes libres de su mayorazgo. Pero en el inicio de esta entrada hemos señalado como reconstructor de estas torres a Simón Gómez de Salazar que se dijo que era nieto de Rodrigo de Salazar y que Varona no parece incluirle en la sucesión. Puede que fuese un colateral con peso en la Corte y en la familia. Incluso puede que ambas versiones sean ciertas y Rodrigo arreglase la torre que posee los escudos más antiguos y Simón la que tiene los balcones y la galería al jardín. No lo sé. Es una suposición. Eso sí, en ambas posturas se sitúa en esta época el escudo principal de la casa, que sería fruto de la restauración y presenta idéntica labra que el asentado en la casa de los Pereda Salazar Arredondo. Miembros de ambas familias fueron coetáneos.
 
El siguiente poseedor de la Casa de Salazar, según Varona, fue Juan de Salazar Múgica, que sirvió en la armada real con el grado de capitán, y casó con María de la Peña, hija del capitán Pedro Díaz de la Peña, señor de la casa de Isla de Villalaín. Fueron padres de Pedro, que le sucedió; Andrés, que también sucedió después; Gaspar que pasó a los virreinatos americanos; y Catalina de Salazar.

 
Pedro de Salazar de la Peña fue caballero de la Orden de Santiago y capitán de caballos en Cataluña. Al no tener descendencia le sucedió su hermano Andrés, también caballero de la Orden de Santiago. Desposó a Catalina de Salazar Isla, de Villarcayo, y tampoco tuvieron hijos. El mayorazgo recayó en Catalina de Salazar que estaba casada con Antonio López de Pereda. Hija de ellos fue María López de Pereda Salazar que se casó con Juan Baltasar Varona, de las casas de Villarcayo, Gijano, Arenillas, Sedano y Rueda de Bocos. Su hijo y sucesor fue José Antonio López de Pereda.
 
Y lo dejamos aquí.
 
 
 
Bibliografía:
 
“Arquitectura fortificada de la provincia de Burgos”. Inocencio Cadiñanos Bardecí.
“Casas de la nobleza en Las Merindades y en La Bureba (siglo XVII). Datos para su estudio”. Lena S. Iglesias Rouco y María José Zaparaín Yáñez.
“Villarcayo y la merindad de Castilla la Vieja (boceto para su historia)”. Julián García Sainz de Baranda.
“Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja. Patrimonio y evolución administrativa”. José Ángel Churruca.
“Blasones y linajes de la provincia de Burgos. V. Partido Judicial de Villarcayo”. Francisco Oñate Gómez.
Ruta Villarcayo y alrededores. 

domingo, 5 de marzo de 2023

Cuarto de Celada o la Cueva del Horno.

 
 
¡Vayamos a la aventura! Conduzcan su coche pasando el pueblo de Arnedo hacia Montejo. Dejen atrás el cruce de Higón y encontraremos a la izquierda de la carretera la pista de tierra que debemos tomar. Tras unos dos kilómetros por la vereda veremos una bifurcación en la que aparece el cartel de "Senda peatonal". En este punto, seguiremos por el de la derecha que lleva hasta el peñón en el que se abre la cueva.
 
En la mayor parte de los manuales la Cueva de “Cuarto de Celada” aparece como “Cueva del Horno” de Montejo de Bricia. Añadimos este nombre al general de “Horno” porque es el que emplean los lugareños. De hecho, este otro nombre permite explicar la función de la cueva: probablemente un hábitat penitencial para los monjes que vivían en el monasterio de Celada del que, según algunos autores, le separan muy pocos metros. El otro, el de Cueva del Horno, procede de la forma de la cueva que es similar al de un horno de pan.

Cuarto de Celada o Cueva del Horno
 
Lo que tenemos delante es una "ermita" rupestre excavada en la roca arenisca. Actualmente está apartada de los núcleos de población con agua en las inmediaciones y con posibilidades agrícolas. Y situado en una pared con el agujero a unos diez metros de altura.
 
Es de una sola nave de unos seis metros de longitud por cuatro metros de profundidad y una altura aproximada de dos metros y medio. Se accede por un estrecho pasillo artificial por el que discurre un canal de desagüe, también labrado. El hueco de ingreso, parcialmente desplomado, se abre al mediodía con vistas a buena parte del territorio y tiene las huellas de los goznes de la puerta. El pasillo externo artificial desciende hasta una plataforma donde hubo una cuevecilla doble, de la que apenas hoy son visibles los fondos, pero es suficiente para afirmar que la Cueva del Horno no fue un recinto aislado sino parte de un complejo. ¿Parte, por tanto, del Monasterio de Celada?


Accedemos bajando una especie de grada, o escalón, a una cámara espaciosa de planta de herradura y cubierta plana que, en el sector del fondo -orientado al Este-, presenta un nicho rectangular que arranca a la altura del suelo. Sobre el nicho, se observan numerosas cruces grabadas, pequeñas hornacinas y profundas ranuras verticales practicadas artificialmente en la pared rocosa, que posiblemente respondan a una compartimentación interior de la cueva mediante un sistema de carpintería. En las paredes y el techo de la cavidad aparecen apiconados (muescas e incisiones alargadas que le proporcionan un aspecto tosco) y restos de cal. Se identifican sectores en que se ha repasado con la azuela. A pesar de haberse descarnado la mayor parte de la capa superficial parece ser que estuvo revocada y encalada.
 
Desde el punto de vista tipológico, el gran tamaño de la cueva, la presencia de ese nicho excavado en la pared Este, las pequeñas hornacinas labradas sobre el nicho y la existencia de ranuras artificiales destinadas a diferenciar sectores en el interior de la cueva, induce a pensar en una cámara que pudo desempeñar funciones de iglesia u oratorio, o bien que sirvió como lugar de reunión con carácter religioso.

Fondo de la cueva del Horno
(Fotografía cortesía del Grupo edelweiss)
 
El yacimiento se localiza dentro de la jurisdicción de Arnedo (Valle de Valdebezana), si bien la propiedad, como del resto del conjunto eremítico y monástico de Celada es propiedad de Montejo (Alfoz de Bricia) que la compró. Ya hemos indicado que consideramos que se trató de un hábitat penitencial que formó parte del monasterio de Celada y, cronológicamente, la cavidad se situaría en el periodo altomedieval, entre los siglos VIII-IX.
 
En cuanto a su actual estado de conservación, la cavidad y los restos de la cuevecilla exterior se han visto alterados por los desplomes ocasionados por la erosión y las pintadas de época actual.


  
Bibliografía:
 
“”Eremitorios rupestres en la comarca de Las Merindades (Burgos)”. Judith Trueba Longo.
“Los alfoces de Arreba, de Bricia y de Santa Gadea. Los valles de Bezana y de Zamanzas”. María del Carmen Arribas Magro.
Blog “Áreas recreativas de Cantabria y alrededores”.
“Catálogo de cuevas de Burgos”.
Blog “UKOBIKE”.