Que no te asusten ni la letra ni el sendero de palabras pues, amigo, para la sed de saber, largo trago.
Retorna tanto como quieras que aquí me tendrás manando recuerdos.


domingo, 7 de febrero de 2021

Una Iglesia en el kilómetro 103

 

 

Para los que peinamos canas –muchas canas- el 103 nos recuerda a un brandy de Bobadilla y Compañía que aconsejaba no tomar más de un copazo al conducir. Claro que, en este caso, el 103 solo es un punto en la carretera de Burgos a Bilbao (CL-629 o BI-636 según donde la tome) en la población de Maltrana.

Siempre que llegamos a esta recta con límite de velocidad, que en algunos genera el irrefrenable deseo de adelantar, nos sorprende ver una iglesia a la vera de la carretera, aislada, sin camino de acceso, pegada a un reciente polígono industrial y a un chalet. ¿Qué hace ahí? Pues les diría que esperar pacientemente su final. Pero la respuesta a la pregunta es otra. Esta era una iglesia –aparentemente desatendida- compartida por Maltrana con el pueblo de La Presilla que está en la curva anterior. Que no se me olvide: está dedicada a San Miguel Arcángel.

El edificio se construyó en 1941. Se ve. Aparentemente es de mampostería sencilla, con contrafuertes, enfoscada en sus laterales y en un ábside rectangular. La portada, a los pies, tiene un arco de medio punto con grandes dovelas, dos ventanitas deterioradas y un gran escudo, todo ello bajo la espadaña de dos cuerpos, rematada en pináculos y cruz, con dos huecos y un campanillo. Se construyó aprovechando los restos de las ermitas de San Miguel de Maltrana y de San Roque de La Pesilla. Maltrana y la Presilla formaron a lo largo de la historia una única entidad jurisdiccional.



Volvamos a mirar la portada y el escudo en ella inserto. Lo timbra un casco ornado de penachos y lambrequines y lleva acolada una confusa cruz. Su campo es cuartelado:

  • Primer cuartel: A su vez cuartelado pero recreando dos escudos heráldicos. En la primera y cuarta porción aparecen tres fajas. En los otros dos: un león rampante. Francisco Oñate Gómez duda sobre su origen y se aventura a cuestionarse si serán las armas de Gutiérrez. Quizá fuese una opción más ajustada pensar que serían las armas de “Calvo”.
  • Segundo cuartel: Una banda, con una novilla –no perro- pasante en el cantón siniestro del jefe, y una estrella de seis puntas, en el cantón diestro de la punta. Sería Maltrana pero en la capilla de La Almudena (Madrid) aparece un perro.
  • En el tercero: De sinople, tres escudetes de oro, cargados de tres barras de azur cada uno, puestos uno y dos, jefe también de sinople con tres cruces patés, de oro. Bordura de oro con ocho aspas de gules: Armas de Gil.
  • Último: De plata, un roble verde, con una becerra –no un lobo como dice Oñate Gómez- pasante al tronco. Bordura del mismo metal y cuatro cabezas de águilas de sable, cortadas, echando sangre: Armas de Novales.


¿A quién pertenece este escudo? Durante su investigación Francisco Oñate interrogó a Inmaculada Campos Martínez, vecina de La Presilla de Mena (Burgos) quien le dijo que el escudo fue una donación de Elisa Partearroyo. Esta señora nació en Maltranilla el 8 de febrero de 1883. Era hija de Domingo de Partearroyo, natural de La Presilla, y de Tiburcia Gutiérrez, natural de Maltranilla. Sus abuelos paternos fueron Manuel de Partearroyo –de Menamayor- y Petra de la Azuela, natural de Río, y los maternos fueron Isidro Gutiérrez, de Ungo, y Feliciana de Novales, natural de Maltranilla. Pero… ¿por qué emplea estas armar? Desconocido. 

¿Es correcto asignárselo a los Partearroyo? No lo sé. Si partimos de que pueden ser las armas de los apellidos Calvo, Maltrana, Gil y Novales no vemos la vinculación de Elisa Partearroyo y sus ascendentes con el escudo. 

Creo que debemos mirar para otro lado: a Roma. El Papa Pio X concedió el marquesado de Maltrana a Isabel de Maltrana y Novales. Es decir, un título pontificio de carácter personal concedido por breve de 30 de mayo de 1913 y declarado hereditario por otra Breve de 21 de junio del mismo año. Al poco, 18 de agosto de 1913, fue autorizado para su uso en España por Real Despacho de Alfonso XIII. 


La marquesa Isabel Agustina Carlota Maltrana y Novales nació en Menamayor (valle de Mena) el 5 de noviembre de 1848 y se casó con Esteban Calvo y Gil. Si se fijan son los cuatro apellidos que identificaríamos en el escudo de la iglesia. Por Breve del Papa Benedicto XV de 29 de febrero de 1920 y Real Despacho de autorización de 26 de julio del mismo año le sucedió su hijo Manrique de Calvo y de Maltrana, II Conde de Gustarredondo. Olvídense de este condado que no nos viene a cuento en este relato. Este fue doctor en Derecho y Caballero del Real Cuerpo Colegiado de la Nobleza de Madrid. Nació el 30 de noviembre de 1875 y falleció el 28 de diciembre de 1944. No tuvo descendencia y está enterrado junto a sus padres en Madrid.

Entonces ¿Quién donó el escudo? ¿El donante del escudo financió la iglesia? O, tal vez, ¿sólo colocaron su escudo en una iglesia en construcción? Realmente, esto último me resulta extraño. Sobre todo si tenemos en cuenta que Isabel de Maltrana y Novales en 1935 financian un colegio en Villasana de Mena.


 

Bibliografía:

 

“Amo a mi pueblo”. Emiliano Nebreda Perdiguero.
“El Valle de Manzanedo. El Valle de Mena.” María del Carmen Arribas Magro.
“Blasones y linajes de la provincia de Burgos. V. Partido judicial de Villarcayo”. Francisco Oñate Gómez.
Revista Hidalguía número 58. Año 1963
“Análisis de las características generales de la heráldica gentilicia española y de las singularidades heráldicas existentes entre los diversos territorios históricos hispanos”. Tesis doctoral de Luís Valero de Bernabé y Martín de Eugenio.

 

 

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